Celicioso es uno de esos lugares a los que tienes que ir sí o sí alguna vez en tu vida, bien porque eres celíaco o porque acompañas a uno y aprovechas para probar sus increíblemente «celiciosas» tartas paranadasaborsingluten que están de muerte.
Una pastelería glutenfree que aún sin quedarnos muy a mano visitamos de vez en cuando. Quizá porque, el sabor que desprende no ya su repostería sino todo el local, bien merece una expedición tribal al corazón de la jungla con sus correspondientes voltios para deshacerte del coche en zona imposible.
La primera vez que fuimos, siendo P aún bastante pequeño, Celicioso fue más bien la excusa para pasar una tarde en Madrid con los niños, montar en metro y esas cosas que a los niños del extrarradio les molan más que ir a la feria.
Había leído algo de unas cupcakes sin gluten, no mucho más, y decidimos que podía ser la guinda de un paseo diferente.
Y lo fue. No sólo para P sino para todos.
La oferta gastronómica libre de gluten avanza y mejora a pasos agigantados y también nuestro universo de lugares y productos preferidos se ha ido enriqueciendo, pero por entonces casi nada de lo que habíamos probado en repostería sin gluten (toda industrial) nos había gustado.
De modo que ya nos contentábamos con que le gustase a P. Lo que no esperábamos era ponernos todos como el Kiko de la manera que nos pusimos.
Carrot cake, triple chocolate, banofee… ¿ quizá fue red velvet? Ya no recuerdo cuáles probamos aquel día hasta salir de allí rodando de felicidad, convertidos en embajadores de la marca forever. Pero estoy segura de que con nada de la carta nos hubiéramos equivocado.
El resto forma parte de una decoración muy cuidada, que combina el aire nórdico del mobiliario de madera, con los carteles de neón y las grandes cristaleras al más puro estilo newyorkino. Un lugar donde prima el diseño desde el escaparate hasta el plato.
Y es que estos chicos lo deben hacer muy bien. Porque a lo largo de estos años, además de comernos sus tartas, los hemos visto crecer inaugurando nuevos locales (gracias por el de Málaga también! Eso sí que es conocer a la clientela!).
Por suerte para nosotros, tenemos Celicioso para rato.